Desde que las iglesias comenzaron a padecer la desolación, muchos hermanos y hermanas en el Señor han percibido claramente que les falta la obra del Espíritu Santo y la presencia del Señor, y todos ansían el regreso del Señor. Sin embargo, cuando recibimos la noticia de que el Señor Jesús ya ha regresado, ¿cómo podemos estar realmente seguros de eso?
Cheng Huize es colaboradora de una iglesia clandestina en China. Lleva muchos años creyendo en el Señor y trabajando para Él con entusiasmo inquebrantable. Asume muchas responsabilidades en la iglesia y tiene compasión por sus hermanos y hermanas. Conforme su iglesia se iba quedando más desolada cada día, la maldad dentro de la misma era cada vez más frecuente.
¡Qué suerte encontrarnos con Dios encarnado! Cristo de los últimos días aparece y obra.
Él expresa verdad y también juzga. Para salvar al hombre, obra personalmente.
Él es normal, siente alegría y pena. Es práctico, ríe y se comunica.
El significado de Su encarnación es muy profundo, al Dios real podemos ver.
Dios Todopoderoso, eres el Salvador que regresó. Hablas al pueblo y juzgas al hombre con verdad. Tus palabras tienen poder y purifican el carácter corrupto del hombre. Tus palabras revelan la omnipotencia y la justicia de Dios. La palabra de Dios juzga el viejo mundo, a todo pueblo y nación. La palabra de Dios logra todo; Dios a Satanás venció. ¡Te alabo, Dios Todopoderoso, eres tan glorioso! Las naciones y pueblos se alegran con el milagro de Tu obra.
Puros y honestos, como un niño inocente, brillantes y llenos de juvenil vitalidad, son como ángeles que vienen al mundo. Abierto el corazón, sin engaño, ellos dignos son. Ganan Su confianza, su corazón dan a Dios. Son la gente honesta a quien ama Dios. Las palabras de Dios como guía diaria, nos bendice y el Espíritu Santo nos guía. Escrutinio de Dios aceptamos, ante Él vivimos.
Dios nos ha traído ante Él, comemos y bebemos Sus palabras. El Espíritu Santo ilumina, entendemos la verdad que Dios explica. Los rituales religiosos, hemos descartado todas esas ataduras. Libres al fin de reglas, con corazones liberados. Somos más felices que nunca, viviendo en la luz de Dios. Más felices que nunca, viviendo en la luz de Dios.
Desde que entraste llorando a este mundo, comenzaste a cumplir tu deber. En el plan y en el orden de Dios, asumiste tu rol e iniciaste el viaje de la vida. Sea cual sea tu pasado y el viaje que está ante ti, nadie puede escapar del orden de Dios y del plan que el cielo trazó, nadie tiene el control de su destino, pues sólo Él, que rige sobre todo tiene el poder de hacerlo.
El carácter de Dios es adorable.
Nuestro deber es dar testimonio de Dios y alabarlo.
Hermanos y hermanas, tan felices juntos.
Toquemos los tambores, cantemos y bailemos.
Alabamos a Dios en la carne porque inicia una nueva era.
Dios mismo obra y habla entre los hombres,
juzga la injusticia del hombre y revela su corrupción.
Cara a cara presenciamos la aparición de Dios.
Dios Todopoderoso ha desplegado el juicio de los últimos días,
con el que inicia la Era del Reino.
Todas las denominaciones padecen una dura hambruna,
todos los pueblos están obligados a buscar el camino verdadero.
Las vírgenes prudentes oyen la voz de Dios y son elevadas ante Él antes del desastre.
Todos aquellos que se nieguen a aceptar a Cristo de los últimos días caerán en el desastre.
Puras y honestas como niños, inocentes y alegres, llenas de vitalidad juvenil,
son como ángeles que vienen a este mundo.
Sin mentiras ni engaños; viven dignamente con un corazón abierto y honesto.
Entregan su corazón a Dios, Él confía en ellas, son las personas honestas que ama Dios.
Todos los que aman la verdad tienen un corazón honesto.