La gestion de Dios es ganar a un grupo de gente
que le adora, que a Él se somete.
Satanás ha corrompido a la humanidad,
pero ella sabe que él no es su padre.
Y reconoce el horrible rostro del enemigo, lo rechaza.
Se presenta ante Dios para aceptar Su juicio y Su castigo...
En la era de la ley, los fariseos eran expertos en la ley de Moisés y guardaban todos los rituales de la ley y las tradiciones antiguas. Sin embargo, no prestaron atención a buscar la voluntad de Dios para que todo lo que habían hecho traicionara la voluntad de Dios. Jesucristo reveló los pecados de los escribas y fariseos. Eran hipócritas que fingían ser muy reverentes con la esperanza de ser elogiados por otros.
Jesucristo nos enseña a no preocuparnos de que los demás no sepan qué cosas buenas hacemos, ni que Dios no sabe. Deberíamos hacer todo lo que podamos para hacer las cosas bien. Porque Dios observa todas las cosas, ni una sola persona o cosa en los cielos y la tierra no está bajo Sus ojos, y mucho menos nuestros pensamientos e ideas. Así como un libro dice, «Dios guarda silencio y nunca se nos ha aparecido, sin embargo, Su obra nunca se ha detenido.