En la tierra, toda clase de espíritus malvados está constantemente al acecho de un lugar para descansar, buscando incesantemente cadáveres de personas para comerlos. ¡Mi pueblo! Debes permanecer bajo Mi cuidado y protección.
He expresado tantas palabras y también he expresado Mi voluntad y Mi carácter, sin embargo, aun así, las personas todavía son incapaces de conocerme y de creer en Mí. O, se podría decir, todavía son incapaces de obedecerme.
Dios Todopoderoso dice: “Él ve esta vez de gestión de la humanidad, de salvar a los seres humanos, como lo más importante de todo. No sólo hace estas cosas con Su mente o con Sus palabras y, sobre todo, no lo hace de manera casual; las realiza todas con un plan, una meta, principios y con Su voluntad. Es evidente que esta obra para salvar a la humanidad tiene una gran relevancia tanto para Dios como para el hombre.