En muchos casos, después de cometer pecados, nos volvemos negativos y débiles, incluso queremos entregarnos a la desesperación. Sentimos que estamos tan profundamente corrompidos que Dios no salvará a la gente como nosotros. Eso es porque no conocemos la obra de Dios. En este versículo, el Señor Jesús dijo que Él vino a salvar a los pecadores, no a los justos. Y a partir de esto entendemos que todo el mundo no es sin tacha, ni perfecto, por lo que debemos vernos a nosotros mismos correctamente. Segundo, Dios nunca ha dicho que vino a salvar a los ángeles y a los justos. Él dijo que vino a salvar a los pecadores. Mientras no dejemos de perseguir la verdad, Dios no nos abandonará.
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Versículo Bíblico ilustrado sobre evangelio de hoy
Scripture quotations taken from LBLA. Copyright by The Lockman Foundation.
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